viernes, 29 de mayo de 2009

Primer taller de medicina tradicional


El 21 y 22 de mayo, en el Centro de Desarrollo Comunitario San José de la Fundación León XIII, se realizó el primer Taller de medicina herbolaria.

Estuvieron presentes personas de comunidades de Cruz del Rosario, Las Margaritas; Bachén, Pechi kil, Tzajalchén, Nuevo Yibeljoj, Yabteclum, Xoyep, Yaxalumil, Puebla, Campo los Toros, Las Limas de Chenalhó; Pinabetal, Chilón; El Edén, San Cristóbal de Las Casas; Nuevo Antonio, San Luis, Guadalupe Cuchilla de Venustiano Carranza. En total, participaron 36 personas de las cuales 31 fueron mujeres y cinco hombres.

El taller inició con un ritual maya que consiste en poner juncia que significa alegría y la madre tierra; flores que forman una rosa del viento; velas de colores en cada punta de la rosa del viento para simbolizar el cielo, la noche, la luz del sol y la sangre como hermanos indígenas e incienso para purificar el alma de los participantes. Esta ritual se realiza para fortalecer las costumbres y tradiciones de las comunidades.

Posteriormente, Javier Herrera Romero, coordinador general del CDC, dio la bienvenida a los participantes y felicitó a las personas presentes por tener el entusiasmo y la disposición para aprender y llevar a la práctica la medicina tradicional en sus comunidades.

Varios de los participantes hablan tzotzil, por lo que se contó con un traductor para que todos comprendieran el contenido del taller. En este espacio las personas aprendieron por qué es importante preservar la medicina tradicional, además de reconocer las plantas medicinales de su comunidad y las propiedades curativas, así como las dosis que deben ser recomendadas.

Este taller fue el primero de diez que se realizarán en transcurso de 2009 para formar a promotores de medicina herbolaria para mejorar la salud de las comunidades, aprovechar los conocimientos de la medicina tradicional y conservar el uso de estas tecnologías de la salud en nuestro país.

La Fundación León XIII, es una institución de asistencia privada fundada en 1996 que, desde el Centro de Desarrollo Comunitario San José, ubicado en San Cristóbal de Las Casas, desarrolla programas orientados a mejorar la calidad de vida de distintas comunidades del sureste de México.
Texto y fotografías de Joyce Ivett Jiménez Cabrera

martes, 19 de mayo de 2009

Entrevista con Julia Narváez

Julia Narváez, coordinadora del Centro de Desarrollo Comunitario de la Fundación León XIII IAP, en Santiago Pinotepa Nacional, Oaxaca estuvo presente en el encuentro de Economía Solidaria que se realizó el pasado 28 de marzo en esa población de Oaxaca.
En ese contexto, Narváez concedió una entrevista sobre el inicio de los trabajos de la Caja de Ahorro en Pinotepa Nacional para la revista Signo de los Tiempos, publicada por el Instituto Mexicano de Doctrina Social Cristiana.
En esta ocasión, compartimos con ustedes esta entrevista en la que se describe la manera en que las mujeres oaxaqueñas se esfuerzan para mejorar las condiciones de vida de ellas, de sus familias y sus comunidades.


¿Cómo nació la Caja de ahorro y para qué?

Por la necesidad de abrir un espacio de ahorro y crédito donde las personas de escasos recursos pudieran ahorrar y pedir préstamos. No había circulante en la comunidad y comenzaron a ahorrar lo que tenían como maíz y frijol. Empezaron 22 mujeres que escasamente sabían leer y escribir.


¿Cuál es la finalidad de la Caja de ahorro?

Ayudar a fortalecer la solidaridad, la ayuda mutua, la fraternidad, y el bien común…


¿Cuántas Cajas hay y en cuántos lugares?

Tenemos 14 cajas en seis municipios


¿Cómo se ayudan las mujeres?

La mejor ayuda es que han recuperado la confianza en ellas mismas porque comparten sus problemas, necesidades y sobre todo porque entre ellas han encontrado muchas soluciones.


¿Cómo entiende la comunidad de Pinotepa el concepto de ahorro y préstamo?

Por lo menos en este grupo de 500 socios siguen un proceso educativo de 12 años donde se privilegia el ahorro, los créditos y los intereses que se cobran por el servicio, se convierten en ahorros. Con esta visión se utilizan los créditos.


¿Cómo ayuda a la comunidad?

Aunque en la ciudad de Pinotepa Nacional seis bancos y 22 instituciones de microcrédito nuestra gente no reúne los requisitos para ser sujetos de crédito y, sin embargo nuestra cooperativa les ofrece la oportunidad de ser socios.


¿Qué valores infunde la Caja de ahorro?

La solidaridad, ayuda mutua, fraternidad, transparencia, honradez y amor al prójimo.


¿Cuántos socios son?

2800 socios.

viernes, 15 de mayo de 2009

Voluntarios y prestadores del servicio social


Fundación León XIII, IAP, creó un espacio para que los voluntarios y prestadores de servicio social se formen en el ejercicio de la responsabilidad social, de manera que no sólo las poblaciones desfavorecidas, sino también con quienes están ajenos a esa realidad, puedan contribuir a la construcción de una sociedad más solidaria.

En esta ocasión presentamos algunos de los testimonios de personas que han tenido la oportunidad de colaborar en las distintas iniciativas que la Fundación promueve en las comunidades con las que trabajamos.

“Mi experiencia en la Fundación León XIII, en San Cristóbal de Las Casas, durante agosto de 2008, fue algo que recordaré toda mi vida. Chiapas en general me enamoró y poder acercarme al trabajo de la Fundación a favor de las comunidades que más lo necesitan fue un privilegio que ojala pudiera repetir. Sobre todo, tuve la oportunidad de colaborar con el área de Economía Comunitaria, conocí a mucha gente encantadora y pude compartir un poquito de mi persona con todos ellos fue una experiencia única. Siempre los llevaré en mi corazón,” Eider Goñi.

Quienes fueron voluntarios y prestadores del servicio social han logrado entender que acompañar solidaria y subsidiariamente el desarrollo integral de las personas y las comunidades, es un proceso que necesita de disposición, tolerancia y sensibilidad para convivir con personas que, desde su realidad de pobreza y marginación viven en la opresión, desigualdad y carencias, pero que desean también superarse, romper los círculos viciosos que los afectan a ellos y sus familias.

Quienes visitan a la Fundación y expresan su deseo de colaborar por un tiempo determinado son un factor fundamental del trabajo que desarrolla la Fundación, pues gracias su esfuerzo y su disposición para convivir con las comunidades ofrecen un testimonio que invita a muchas otras personas a esforzarse en la lucha contra la .pobreza y la marginación.

“Mi experiencia en el CDC de San Cristóbal como voluntario fue inolvidable para mí. Participé en la creación de una herramienta para el control de presupuestos para los proyectos, que facilita la elaboración de los balances contables y las evaluaciones. Lo que más me aportó fueron las visitas a las comunidades. Era una bella lección de vida para comprender mejor la situación social y económica de las poblaciones indígenas en Chiapas.

“Fue un honor participar en trabajo extraordinario del CDC Chiapas y tener conciencia de las dificultades de las poblaciones indígenas en México. Yo consejo a todos los estudiantes que desean enriquecerse, quedarse un tiempo con el equipo del CDC Chiapas, aportar sus esfuerzos y vivir buenos momentos,” Gautier Danguis.

El testimonio sincero de los voluntarios y los prestadores de servicio social es una semilla de la realización humana que cada uno de nosotros puede sembrar, por eso te invitamos a que formes parte de esta comunidad y así construir un mundo más justo, solidario y humano.
La Fundación León XIII, es una institución de asistencia privada fundada en 1996 que, desde el Centro de Desarrollo Comunitario San José, ubicado en San Cristóbal de Las Casas, desarrolla programas orientados a mejorar la calidad de vida de distintas comunidades del sureste de México.
Texto y fotografías de Joyce Ivett Jiménez Cabrera

viernes, 8 de mayo de 2009

Invitación al bazar 2009


El Centro de Desarrollo Comunitario San José, de la Fundación León XIII, IAP., en San Cristóbal de Las Casas, te hace una cordial invitación para donar artículos que no uses y estén en buen estado para hacer un bazar. Si deseas más información escríbenos a: Calzada de la Escuela no. 9, Quinta San Martín, San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, 29210 México. O llámanos al (01) 967 67 8 3451 o envía un correo-e a centrodesarrollo@fleonxiii.org.mx/ cdcsanjose@gmail.com. Contamos con tu participación

viernes, 1 de mayo de 2009

Testimonio de Don Belisario


Empezamos como grupo, todos parejos. Le dije a mi esposa, Esperanza, que intentáramos y poco a poco veríamos resultados, dijo Belisario Méndez López.

A la luz de la luna, afuera de su casa, Méndez López, más conocido como don Beli, estaba sentado y platicaba su experiencia con la Fundación León XIII, IAP.

“Recordamos a los compañeros de Seguridad Alimentaria de la Fundación desde que nos dieron el taller de elaboración de pan, en el 2007, nos dejó una buena impresión. Esperanza y las demás mujeres aún se reúnen para hacer pan al menos una vez a la semana. Eso me da mucho gusto, porque hacen pan dulce y de sal, es para autoconsumo y en ocasiones venden un poquito.”

Don Beli, durante toda su vida ha vivido en Cruz del Rosario, municipio de Las Margaritas, Chiapas. A sus 65 años, él cree que puede salir adelante mientras no deje de trabajar.

Don Beli confesó que cuando los colaboradores de Seguridad Alimentaria (SA), le enseñaron el proyecto de Mejora de la salud de campesinos y campesinas indígenas de Chiapas, estaba inseguro, y no creía mucho, pero aceptó porque los beneficios serían directamente para él y su familia, sólo bastaba trabajar y tomar en cuenta las recomendaciones de los colaboradores del Centro de Desarrollo Comunitario San José.

“Alfonso, Marcelino y Jacinto trajeron los materiales para hacer las estufas justas, trabajamos en el patio hasta el anochecer. Varios compañeros no dejaron que sus esposas aceptaran el cambio de fogones a estufas justas, porque no querían pagar una cuota de recuperación. Yo pensé en Esperanza, y cómo le afecta el humo, por eso acepté; por cuidar a mí esposa, la madre de mis hijos.

Los hombres no probamos el trabajo de casa, desde muy temprano vamos al trabajo de campo. Las mujeres trabajan a partir de las cuatro de la mañana y se van a descansar hasta las ocho de la noche, ellas también se cansan y se enferman, y a veces no vemos su trabajo ni su salud.”

Las estufas justas reducen el consumo entre 50 y 75 por ciento de leña, disminuyen las enfermedades respiratorias producidas por el humo, además reducen la exposición al humo de la cocina; estas acciones son fundamentales para conservar el entorno de las personas y su dignidad.

“Las estufa justa que está en la cocina de Esperanza, la terminamos mi hijo y yo, porque el día que llegaron los muchachos de Seguridad Alimentaria, no les alcanzó el tiempo. Mi hijo midió el tubo, luego se trepó en un escalera, y al final le pusimos el cemento para tapar las orillas. Cuando regresaron los muchachos la estufa ya funcionaba.”.

Alfonso Liévano Narváez, Marcelino Pérez Bolom y Jacinto Ruíz Méndez fueron los primeros en conocer al grupo de la comunidad de Cruz del Rosario, y enseñarles los beneficios de las estufas justas. Posteriormente, Elisabet Sintes impartió un taller de elaboración de compostas orgánicas para que la población aproveche los desechos orgánicos diarios.

Los colaboradores de la Fundación León XIII IAP., apoyan al desarrollo integral de las personas que están en situaciones de pobreza, marginación o emergencia, a través del acompañamiento solidario y subsidiario en procesos incluyentes y sustentables.

Don Beli es uno de los integrantes del grupo que sigue paso a paso las recomendaciones de SA, asegura que si no prueba las recomendaciones combinadas con su experiencia, no verá resultados. Además, dijo que tiene confianza en que sin salir de su comunidad podrá mantener a su familia. “Todo lo que hemos hecho hasta hoy, tal vez es poco, pero en un futuro sabremos que fue lo mejor.”

La Fundación León XIII, es una institución de asistencia privada fundada en 1996 que, desde el Centro de Desarrollo Comunitario San José, ubicado en San Cristóbal de Las Casas, desarrolla programas orientados a mejorar la calidad de vida de distintas comunidades del sureste de México.

Texto y fotografías de Joyce Ivett Jiménez Cabrera